Actualizado el: Lun, 07/19/2021 - 14:06
Tres personas fueron asesinadas el 17 de junio de 2021, en el municipio de San José del Fragua, mientras viajaban en lancha rumbo a el municipio de Piamonte, en el departamento del Cauca. Fueron interceptados por hombres armados, mientras navegaban sobre las aguas del río Zabaleta, donde al parecer, unos meses atrás, uno de los tripulantes había sido amenazado por Comandos de la Frontera, por estar transportando pasta de coca proveniente del Frente Carolina Ramirez.
Las víctimas fueron Armando Núñez, comerciante, su esposa Lorena Andrea Escobar y el lanchero, Duver Escarpeta. Dos de los cuerpos fueron recuperados del río. La comunidad señala que, un mes antes a la masacre, circulaba un panfleto con los nombres de algunas personas que vivían del comercio de la pasta de la coca, y eran señalados de colaborar con el grupo armado Carolina Ramirez, que hace parte de las disidencias de Gentil Duarte.
Una semana más tarde, el 24 de marzo, cinco personas fueron asesinadas en las zona rural de San José del Fragua, en las veredas Fragüita y Zabaleta. Según el diario El Tiempo, las autoridades adelantan investigaciones respecto a lo ocurrido, y consideran que estos estos hechos podrían estar relacionados con el control territorial y la reconfiguraciòn de los grupos armados ilegales que se disputan el control del municipio y departamento.
En 2020 también se presentaron otros hechos victimizantes contra sus habitantes. Fueron asesinados el esposo e hijo de la presidenta de una junta de acción comunal allí, y Comandos de la Frontera, frente a toda la comunidad, le quitó la vida a algunos de sus miembros para sembrar miedo.
San José del Fragua, al hacer parte de la bota caucana, y encontrarse cerca a la frontera con el Putumayo, junto al río Caquetá —principal afluente para transportar marihuana desde el Cauca hasta Brasil—, junto a Cartagena del Chairá, un territorio selvático, ambos se han convertido en lugares estratégicos para desarrollar la compra y venta de pasta de coca.
En el Caquetá actualmente operan el grupo armado residual Gentil Duarte e Iván Mordisco, en los municipios de Rionegro, San Vicente del Caguán, Remolino, y Cartagena del Chairá, algunos bajo el mando de su Frente Carolina Ramirez. Además de Comandos de la Frontera, la Segunda Marquetalia y del grupo armado delincuencial Los Caqueteños.
El río Caquetá es disputado por el frente Gentil Duarte e Iván Mordisco, y el grupo armado residual, Comandos de la Frontera, —conformado por algunas disidencias de las Farc-Ep, y miembros del grupo paramilitar Bloque Putumayo, junto a la Segunda Marquetalia—quien el pasado 15 de marzo de 2021, Comandos de la Frontera o Comandos Defensores de Frontera, Ejercito Bolivariano, anunció su unión a la Segunda Marquetalia, en un video conocido a través de la antigua pagina web de la guerrilla Farc-Ep, donde Comandos explicaba los motivos de su alianza.
Esta reconfiguración y expansión por el territorio, ha hecho que aumenten los casos de reclutamiento a menores en el país, y el departamento, especialmente en Solano, Cartagena del Chairá y Florencia, por lo que cada vez son más jóvenes quienes comandan estos grupos. Prueba de ello, ha sido la captura de María Edith Hurtado Ramón, alias ‘Marcela’, el pasado 6 de abril de 2021, quien reclutaba menores de edad para sumarlos a las filas del grupo armado organizado Carlos Patiño, en el Cauca.
Algunos grupos defensores de derechos humanos han denunciado que uno de los grupos que se disputa el Caquetá, trabaja con bandas delincuenciales en Florencia, como “La Constru”, “Los Escorpiones”, “Los Cobra” y “los Azules”. Convirtiéndose en su brazo sicarial y de control urbano en los centros poblados.
Además del desplazamiento del pueblo misak en febrero de 2020, que hubo de salir de su resguardo El Águila, en el municipio de Solano, un mes antes de la pandemia, y desde entonces se encuentra asentado en el coliseo del municipio.