Datos principales

Municipio y departamento: Santa Rosa de Osos , Antioquia

Vereda y corregimiento: San Isidro

Grupo Armado: Bacrim , Bandas Criminales Emergentes, Bacrim (2006 - )

Fecha: 2012-11-07

LISTADO DE VÍCTIMAS

William Alberto Espinoza Viana
Soel Espinoza Olaya
Fernando Arley Viana
Adrián Alberto Uribe Barrientos
Víctor Alfonso Correa Gómez
Gloria Zenaida Chavarría Posada
Pompilio de Jesús Gómez
Enrique Duque
Manuel Baena Fernández
César Taborda Vanegas


**Líderes sociales y población vulnerable: Mostrará las masacresen las que murieron líderes de las comunidades, funcionariospúblicos, profesores, sacerdotes, políticos, indígenas, menores de edad y mujeres en estado de embarazo.

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Masacre de Santa Rosa de Osos 2012

Raúl Arboleda - Revista Semana
Foto por: Raúl Arboleda - Revista Semana

Actualizado el: Jue, 10/10/2019 - 16:26

A las 5:30 de la tarde del 7 de noviembre de 2012, tres miembros de la banda criminal ‘Los Renacentistas’, conformada por ex integrantes de ‘Los Rastrojos’ y otras bandas delincuenciales, asesinaron a 10 personas e hirieron a otra en el municipio de Santa Rosa de Osos, Antioquia. El grupo armado llegó a la finca La Española en la vereda San Isidro, y disparó y lanzó una granada contra un grupo de personas.

Las víctimas, entre las que estaba un padre y su hijo, eran cultivadores de tomate de árbol que trabajaban en el predio. Más de cien campesinos se desplazaron a raíz de estos hechos. Los ‘paras’ perpetraron la masacre porque Antonio Lopera, dueño de la finca, se negó a pagarle a la banda una millonaria extorsión.

En junio de 2013, por este crimen un juzgado especializado de Antioquia condenó a 50 años de cárcel a Esneider Evelio Hernández Madrigal alias ‘Manco’, Oscar Darío Barrientos alias ‘Caracho’ y Yan Carlos Martínez Genes alias ‘Daniel’, ex integrantes encarcelados de ‘Los Renacentistas’.  A comienzos de abril de 2017, la Sala Penal del Tribunal Superior de Antioqua confirmó la sentencia de 44 años y 6 meses de prisión contra Arley de Jesús Sepúlveda Torres, alias 'Jorge 18', y Ramiro Alberto Pérez Castro, alias 'Cáceres', como autores intelectuales de la masacre.

Esta banda criminal ha delinquido en el norte de Antioquia y en parte la integran paramilitares que no se desmovilizaron.

Grupo armado relacionado:

Bandas Criminales Emergentes, Bacrim (2006 - )

Luego de la desmovilización de la mayoría de grupos paramilitares entre 2004 y 2006, varios narcotraficantes que pertenecían a diferentes bloques de las autodefensas se reorganizaron y continuaron delinquiendo. Desde ese entonces, el gobierno de Álvaro Uribe comenzó a referirse a estas nuevas estructuras con la sigla Bacrim, por Bandas Criminales Emergentes. En todo el país, antiguos subalternos de los grandes capos del narcotráfico tomaron el control del negocio y conformaron sus propios ejércitos. Los hermanos Juan de Dios y Darío Antonio Úsuga se quedaron con los negocios de Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’, uno de los principales narcos de las Auc, que hizo parte del Bloque Centauros en los Llanos. Los Úsuga conformaron la banda de ‘Los Urabeños’, una de las más grandes del país, y que cuenta, según informes de inteligencia con más de 1.500 hombres distribuidos en varios departamentos. En el occidente del país, los hermanos Javier Antonio y Luis Enrique Calle Serna, conocidos como ‘Los Comba’, ex paramilitares que había delinquido con el cartel del Norte del Valle conformaron la banda ‘Los Rastrojos’, que asumió el control de los cultivos y laboratorios de coca en Nariño, Cauca y el Valle. En otras regiones del país, reductos paramilitares continuaron controlando el narcotráfico y asesinando líderes sociales. Estas Bacrim usan diferentes nombres como Ejército Revolucionario Popular Antisubversivo de Colombia, Erpac, en el Guaviare o las ‘Águilas Negras’, como son llamados varios grupos de este tipo en diferentes zonas, pero que no tienen ninguna relación entre ellos. Aunque varios de los jefes de estas bandas están tras las rejas o han muerto en enfrentamientos con la Policía, estos grupos continúan atacando las comunidades en las zonas en que se disputan el control del narcotráfico con asesinatos selectivos y masacres.