Los colegios como blanco y trinchera en la protesta social
Por: Alejandra Cetina y David Bernal
La noche del 4 de mayo varios habitantes del barrio La Libertad en Bosa denunciaron que un helicóptero de la Policía Nacional aterrizó dentro del Colegio Claretiano de la localidad. Según quienes grabaron la operación, también estaban saliendo varios uniformados por una de las puertas principales del lugar. A estas denuncias se le suma la del padre Josué Giraldo, provincial de los Claretianos en Colombia y Ecuador, en la que por medio de un video en redes sociales afirmó que “en horas de la noche, aterrizaron abusivamente en las instalaciones del Colegio”. Al día siguiente, la institución educativa confirmó los hechos y los rechazó, asegurando que no se tenía conocimiento ni autorización de la operación.
La Policía Nacional, por su parte, sostuvo que se trató de una situación de abastecimiento para el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) en medio de los enfrentamientos entre los manifestantes y la Fuerza Pública durante el Paro Nacional. Si bien no existen leyes en Colombia que explícitamente prohíban el uso de instituciones educativas por parte de las fuerzas policiales para sus operaciones, sí existen tratados internacionales y resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que regulan este actuar.
El artículo 38 de la Resolución 72/133 de la ONU, aprobada por la Asamblea General en diciembre de 2017, “reitera la necesidad de proteger y respetar los establecimientos educativos de conformidad con el derecho internacional humanitario, condena enérgicamente todos los ataques dirigidos contra escuelas y el uso de escuelas con fines militares en contravención del derecho internacional humanitario”.
Frente a situaciones como la del Colegio Claretiano en Bosa, Camilo Bácares, sociólogo e investigador en infancias y violencia, sostiene que estos actos tienen consecuencias, más allá de combinar lo escolar con lo militar, para los estudiantes pues también ponen en riesgo sus vidas. Esto sucede porque existe la posibilidad de que la sociedad civil y actores armados construyan “una idea de que los Claretianos apoyan a la Policía en el marco de la represión de la protesta social en Bogotá, lo que los puede convertir en objeto de retaliaciones de distintas fuerzas”, aclara Bácares.
A este caso se le suman siete más en los que colegios, escuelas e instituciones educativas fueron usadas, atacadas, amenazadas o pernoctadas en el marco de la protesta social. Los hechos que fueron registrados en la base de datos del especial ‘Colegios de la guerra: otras víctimas del conflicto armado’ van desde el año 1999 hasta el 2021.
1 de noviembre de 1999. La comunidad estudiantil del Colegio Nacional Santa Librada en Neiva, Huila, fue amenazada por la Fuerza Pública cuando esta ingresó a las instalaciones forzosamente durante una protesta pacífica. Los estudiantes denunciaban “la supuesta infiltración de un miembro de las fuerzas militares en el Consejo Directivo del establecimiento en representación del sector productivo”.
20 de septiembre del 2002. A las 6:45 de la mañana, miembros de la Fuerza Pública ingresaron de manera violenta a la sede del Instituto Nacional de Educación Media de Popayán, Cauca. Los hechos se dieron luego de que los estudiantes ocuparan la institución como protesta por las medidas del Gobierno Nacional, la represión de la movilización social y que varios manifestantes se conglomeran en la Vía Panamericana. En la operación resultaron varias personas detenidas, capturadas y heridas. Además, la fuerza pública dañó parte de las instalaciones de la institución.
30 de agosto de 2013. La comunidad de Cajamarca, Tolima, denunció que miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) ingresaron a las dos de la mañana del 30 de agosto a una escuela del municipio. Allí dormían participantes de la jornada de protestas que se vivieron el día anterior durante el Paro Nacional Agropecuario y Popular, que contó con la presencia de cerca de cinco mil personas en el municipio. De acuerdo con la comunidad, una vez adentro, el ESMAD atacó con balas de goma y gases lacrimógenos, mientras golpeaba y detenía, a casi 30 personas.
27 de abril de 2014. Comunidades de Berlín, Santander, denunciaron que dicha zona fue militarizada por orden del Ministerio de Defensa, a raíz de las protestas pacíficas que se adelantaban por la delimitación del Páramo de Santurbán que se realizó sin consulta previa. La población aseguró que, dada la situación, el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) convirtió la sede B del Colegio de Berlín en su “centro de reunión, descanso e inteligencia militar”, en contravía al DIH.
12 de julio de 2016. La comunidad educativa del Colegio La Nueva Familia de Duitama, Boyacá, denunció que fue amenazada por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) durante el Paro Nacional de Transportadores de Carga ese mismo año. Según la comunidad, la Fuerza Pública lanzó gases lacrimógenos indiscriminadamente contra la Institución, haciendo que los estudiantes tuvieran que salir de los salones de clase y refugiarse en la parte de atrás del colegio. Además, una estudiante menor de edad resultó herida y tuvo que ser llevada a un hospital.
15 de agosto de 2017. La comunidad de Segovia, Antioquia, denunció que el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) se tomó las instalaciones del Colegio Liceo Liborio Bataller de Segovia con el fin de atacar desde allí a la comunidad que se encontraba protestando desde finales de julio. Las manifestaciones se habían iniciado por parte de la Mesa Minera de los municipios de Segovia y Remedios.
12 de febrero de 2018. La comunidad del municipio de Sabanalarga, Antioquia, denunció al Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de generar terror entre las niñas y los niños del colegio del municipio durante las protestas que se desarrollaron a raíz de la construcción de la hidroeléctrica Hidroituango.
*Al cierre de esta nota, la redacción no recibió respuesta al derecho de petición enviado a la Policía Nacional para solicitar información acerca de los hechos ocurridos. El contenido se actualizará una vez se reciba la respuesta.
Actualizado el: Jue, 05/13/2021 - 13:58